miércoles, 21 de enero de 2015

Los Padres Paúles, 142 años en Puerto Rico

Diácono Jorge Almodóvar Capielo

El 27 de septiembre, la Congregación de la Misión, las Hijas de la Caridad, la Asociación Internacional de Caridades, la Sociedad San Vicente de Paúl, las Juventudes Marianas Vicentinas, la Asociación de la Medalla Milagrosa, así como un gran número de asociaciones y grupos nacidos de la espiritualidad Vicenciana, celebramos la muerte gloriosa de nuestro Fundador, San Vicente de Paúl.

La Congregación de la Misión, conocida como “los Padres Paúles” llegaron a Puerto Rico el 24 de junio de 1873. Fueron llamados para la atención espiritual de las Hijas de la Caridad, dar misiones y formar a los futuros sacerdotes de la Isla. En 1926 [la Congregación] fue elevada a Vice Provincia. En1931 se trasladan a fundar la Congregación en Venezuela. En 1955 se extienden a la República Dominicana y en 1986 a Haití.

La Provincia eclesiástica de la Congregación de la Misión de Puerto Rico, comprende también la isla de la Española. Fue elevada a la categoría de Provincia en el 1955. Mediante el diálogo que sigue, el lector puede hacerse una idea de quiénes somos, dónde y para qué estamos.



¿Qué es la Congregación de la Misión?

La Congregación de la Misión es también conocida aquí como los Padres Paúles y, en otros lugares, como Vicentinos, Lazaristas e incluso como Vicencianos. Congregación de la Misión es su nombre oficial. Cuando un trío de sacerdotes liderados por Vicente de Paúl empezó a evangelizar a los campesinos del sur oeste de Francia, la gente, por falta de otro nombre, les llamó los sacerdotes de la misión. El nombre pasó a los documentos y ése es su nombre.

¿Cuántos años llevan los Paúles aquí, en Puerto Rico?

Los Padres Paúles llevan142 años en Puerto Rico, pero la Provincia se extiende también a la República Dominicana donde llevan 60 años y a Haití donde se arraigó desde 1986.

¿De qué manera se les llamó y vinieron a la Iglesia en Puerto Rico?

Las Hijas de la Caridad, llamadas por el gobierno colonial en 1863, se sentían abandonadas espiritualmente. Incluso se hallaban en peligro de diluirse por falta de orientadores. Algunas abandonaron su vocación. Otras se pasaron a una orden de clausura, una vida extraña a su carisma de servicio. Un delegado de los superiores pasó visita, escuchó a las hermanas y recomendó la presencia de los PP. Paúles para su atención. La Provincia de Madrid, que era responsable tanto de las hermanas como los misioneros ya establecidos en Cuba, desde allí mandó que dos Padres Paúles vinieran desde la Habana y se quedaran para atender a las hermanas. Esto fue en 1873. Viendo la mejoría, y la oportunidad, el obispo de San Juan les dio más y más trabajo y pidió más sacerdotes paúles y les encomendó oficios de cancillería y de pastoral. Así se les encomendó las parroquias San José y Santa Ana en el Viejo San Juan y San Ildefonso, el único seminario que existía entonces en la Isla. Así se les pidió a l7s recién llegados Padres Paúles que tomaran la parroquia de la Guadalupe de Ponce (La Catedral de Ponce) donde pronto se estableció también la primera escuela privada y cristiana del área sur. Más adelante surgieron otras tres parroquias en Ponce dirigidas por los Padres Paúles: La Milagrosa, San Vicente y Cristo Rey, esta última fue entregada posteriormente a la Diócesis de Ponce.